A, que bueno

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Mi tercer trabajo, como mejoría en este caso me di cuenta de que para escuchar los globos de dialogo mis personajes necesitarían de orejas ¿Como no me di cuenta de que carecían de orejas antes? Pues si me di cuenta, pero la flojera es incuestionable.

Pero en fin, aquí es donde hago un pequeño guiño a Diogénesis de Sinope (una persona de admirar) antiguo filósofo que solía masturbarse en la plaza publica para luego declarar que ojala se pudiera calmar el hambre frotándose la barriga ¡Estaban locos esos cínicos!